LA MALETA
El hombre cariacontecido agarraba con gran fuerza su vieja maleta, con la que había recorrido junto a él gran parte del mundo. Cuando en aquella época de esplendor iba con el a todas partes y parecía que esa maleta relucía, no porque fuera nueva, sino porque él era un hombre apreciado allí dónde fuera. Amigos y enemigos se peleaban por ir a verle, o simplemente pedirle consejo, porque él creía que en esa época había llegado a tocar las estrellas con las puntas de los dedos.
Pero todo aquello había terminado, de repente se encontró en un hostal del viejo casco de aquella ciudad de provincias, sólo y colocando su maleta encima de la cama, la miraba y no sabía si abrirla o simplemente dejarla allí y contemplarla, intentando recordar en cuantos lugares del mundo habían estado juntos.
Se sentó y estuvo largo tiempo pensando en que hacer y como empezar de nuevo.
Estaba cumpliendo su castigo por haber roto una de las reglas de oro: ¡ Nunca hay que luchar contra los necios con sus mismas armas¡. Era consciente de que su castigo iba a ser largo, no sabía cuanto iba a durar y su tristeza embargaba su corazón, ese corazón que el entendía había sido capaz de dar lo mejor de si mismo, o tal vez no; simplemente había hecho lo posible por dar y sembrar con la esperanza de recoger algún día, aunque fuera un pequeño fruto. Pero en el fondo el sabía que no iba a ser así.
Finalmente tomó la decisión de no abrir la su maleta y salir a la calle; necesitaba estar entre la gente.
Paseó y paseó largamente intentando divisar una cara amiga, escudriñaba para ver si entre aquellas personas podría encontrar el calor humano que él en alguna ocasión había tenido hacia los demás, pero a medida que pasaba el tiempo y más andaba, una asfixia sofocante le mostraba que estaba por primera vez en una ciudad extraña y cuantas más caras veía más extraños le parecían.
Se acerco hasta un pequeño bar, se sentó en una de las pocas mesas que había en su terraza y por primera vez se sintió solo y empezó a llorar. No rodaban lagrimas por sus ojos, lloraba su corazón, nadie ni nada podía consolarle, sólo pensaba en la maldad humana. Se propuso intentar recordar cuántos corazones justos había conocido y de repente no supo o no pudo contarlos: Era superior a sus fuerzas y su lagrimas y su estado emocional se lo impedían .
Transcurrido un tiempo, consideró que parte de su vida había terminado y mirando hacía el cielo no pudo más que intentar refugiarse en su fe; su fe en Dios, aunque era consciente de que eso ya no estaba de moda. El hombre es al fin y al cabo, él y sus cosas.
De pronto pensó que tal vez era todo un castigo, una forma de mostrarle una nueva vida, que aunque no le gustara, no le quedaba más remedio que aceptarla, porque algo superior a él así lo había decidido. Después de pedir algo para beber, y reflexionar largo tiempo se echó un trago al coleto intentando apagar su sed.
Volvió de nuevo a andar sin rumbo conocido, hasta que, cansado regresó de nuevo a su triste albergue, abrió la puerta de su habitación y lo primero que vio, fue que su maleta seguía encima de su cama; y por fin decidió abrirla, cuando lo hizo no pudo reprimir su sorpresa, porque se dio cuenta de que todo lo que había en ella era vanidad y anhelo de viento.
TOMAS CANO
Mes: noviembre 2013
LA SABIDURIA
LA SABIDURIA
¿Porqué tenemos que sufrir?. Si observamos nuestra vida encontramos muchas excusas para nuestro sufrimiento, pero ninguna razón válida. Esto mismo es aplicable a la felicidad.
La única razón por la que somos felices es porque nosotros mismos lo decidimos. La felicidad es nuestra elección, como también lo es el sufrimiento.
Había una vez un hombre que quería trascender su sufrimiento, de modo que se fue a un templo budista para encontrar un maestro que le ayudase. Se acercó a él y le dijo, “Maestro si medito cuatro horas al día, ¿cuanto tiempo tardaré en encontrar la iluminación?.”
El maestro le miró y le respondió: “Si meditas cuatro horas al día, tal vez lo consigas dentro de diez años.”
El hombre pensando que podía hacer más le dijo: “Maestro, y si medito ocho horas al día ,¿ cuanto tiempo tardaré en alcanzar la iluminación ¿”.
El Maestro le miró y le respondió: “ Si meditas ocho horas al día, tal vez lo lograrás dentro de veinte años”.
Pero ¿Por qué tardaré más tiempo si medito más?.
El Maestro contestó:” No estás aquí para sacrificar tu alegría ni tu vida. Estás aquí para vivir, para ser feliz y amar. Si puedes alcanzar tu máximo nivel en dos horas de meditación, pero utilizas ocho, solo conseguirás agotarte, a parte del verdadero sentido de la meditación, y no disfrutar de tu vida. Haz tu máximo esfuerzo y tal vez aprenderás, que independientemente que medites, puedes vivir, amar, y ser feliz”.
TOMAS CANO
LA AVIACION Y SU CASTA
LA AVIACION Y SU CASTA
Seguro que usted será uno mas, de las personas que viaja con frecuencia y si por casualidad es uno de los que va a viajar en avión, debe estar preparando no solo para enfrentarse a la excitación del viaje, o la monotonia porque lo hace muy seguido cosa natural que va unida algunas veces a la ilusión de hacerlo. Pero conviene que sea precavido, porque antes de llegar a su destino y después al regreso, pasara por una experiencia inolvidable que es el transitar por el mundo de los “Celestes”, porque no se si sabe que en la aviación el mundo esta dividido en “Celestes y Terrestres”.
No se haga ilusiones, usted es un terrestre.
Voy a intentar explicarle desde mi punto de vista como identificara esa casta.
Como ocurre en el Tíbet las palabras “hueso” y “raíz” son muy importantes para ellos. También para la casta de celestes, el mundo humano esta hecho de hueso y raíces.
A los huesos se les llama casta. En China se creía que los huesos tenían algo que ver con los umbrales de las puertas. Por eso los umbrales de las puertas de los aeropuertos son altas, mientras que las de los terrestres son bajas. A los celestes el tener el umbral muy alto les permite entrar y salir de las nubes.
Todo esto que puede parecerles una fantasía no lo es. Cuando cruce usted la puerta del aeropuerto entrara en un mundo en general desconocido, donde las personas que trabajan en el mismo hablan un idioma distinto al suyo. (cheking, Boarding, gate, low cost, ryanair , emergency, exit, delay, etc.etc.).
Pero no se preocupe en exceso, usted ira sorteando todas estas barreras magníficamente, solo tenga paciencia y sobre todo no se caliente, sea feliz, piense en llegar a su destino.
Cuando llegue al aeropuerto diseñando para gloria del arquitecto de turno no se preocupe de las incomodidades, al fin y al cabo con suerte estará usted en el muy poco tiempo.
Diríjase al mostrador de facturación allí encontrara largas colas, es normal. Cuando llegue su turno no se olvide de identificarse correctamente y no se preocupe si la persona que le atiende no levanta los ojos del ordenador, es normal, recuerde lo de la casta. Si le comunica que tiene retraso su vuelo, sobre todo mantenga la calma, procure buscar algún bar y tomarse alguna bebida que no sea estimulante. No pregunte, espere, cuando llegue al bar encontrara algunas personas en la barra mezclada con los viajeros que usan un Walky Talky, esos aparatos que permiten comunicarse con otras personas que están en la lejanía o tal vez entre las nubes, no pregunte a esas personas vayan o no con uniforme. Si no llevan uniforme recele porque pueden ser ejecutivos del aeropuerto en servicio, y si entre ellos hay uno con chaqueta y corbata que es el centro de atención de todos ellos ni se atreva, ese es el Director del aeropuerto es un intocable, en pocas palabras, es un “BHODI” el árbol de la iluminación en chino
Si debe protestar hágalo solo cuando sean mayoría de lo contrario absténgase, procure a pesar de todo hacer gala del don del silencio, que siempre supera las palabras.
Cuando haya pasado todos los interminables controles, necesarios para identificarse y suba al avión, recuerde que sigue en un mundo ajeno al suyo la única ventaja que tiene es que ha dejado de estar en un edificio que es un monopolio, y como tal debe ser conservado según sus propietarios que tienen un afán recaudatorio incontrolado y que es capaz de poner en situación difícil a las compañías aéreas.
Si en el avión le dicen que tiene que pagar su comida y bebida, no se extrañe ahora se esta de moda. Pague o por el contrario la próxima vez procure llevar consigo un bocata de casa, recuerde siempre la frase de Charles Reader “Una sonrisa su espada”.
Para terminar decirle que lo único verdaderamente fascinante del avión, es el hecho de que una maquina parecida a un tubo de acero le trasladara de un lugar a otro en un breve espacio de tiempo y que tal vez eso le compense de todos los obstáculos que ha tenido que sortear y le recuerde lo que escribió Neruda “Vuelas sobre el mundo inmóvil, en la altura. Cielo puro, viento nulo”
LOS CRUCEROS TURISTICOS
LOS CRUCEROS TURISTICOS
El concepto de navegar por placer en barco, fue una idea que nació hace 160 años.
En 1837 Arthur Anderson, fundo una compañía que se llamo Peninsular Steam Navigation Company, pero no empezó a operar hasta 1844, época en que empezaron a vender los primeros cruceros por el mediterráneo. De esta forma nació la industria de las Vacaciones en el mar.
En 1920 los cruceros se pusieron de moda, donde todo el mundo esperaba el más alto nivel de acomodación y servicio, asi como, una gran calidad en la comida como en las diversiones a bordo.
Todavía hoy este concepto es lo que se espera de los actuales cruceros.
En 1930, se produjo una gran competencia en este medio de transporte turístico de lujo.
Las grandes navieras construyeron los barcos mas lujosos que uno pueda imaginarse con un gran glamour y confort, barcos como el Queen Elisabeth y el Mauritania fueron los pioneros en cruzar el Atlántico Norte, y este hecho se convirtió en una cuestión fundamental y en una razón de prestigio nacional.
El boom de los cruceros transatlánticos empezó a finales de 1940 y en los años 50, donde miles de personas eran transportadas en estos lujosos transatlánticos. Hasta que en 1958 el primer avión reactor cruzo el Atlántico, produciéndose el cambio irreversible del barco al avión.
Ese año de 1958, fue el último en que se transportaron más pasajeros por barco que por avión. De cualquier forma por algún tiempo siguió siendo mas barato viajar en uno de esos cruceros que en avión, las compañías navieras siguieron teniendo unos buenos resultados económicos hasta principios de 1970 en que apareció por primera vez el Boeing 747, Jumbo.
A partir de ese momento los resultados para las navieras fueron un fiasco y muchas tuvieron que cerrar. Las navieras que sobrevivieron a esa gran crisis tuvieron que desarrollar nuevos mercados para sus barcos.
Se puede decir que el crecimiento de nuevo de los cruceros fue gracias al Caribe, la salvación para los supervivientes de la lucha contra el avión, asi como, ese crecimiento en el Caribe permitió la creación de nuevas compañías navieras. Nació un nuevo producto turístico, el combinado entre avión y crucero.
Los pasajeros son hoy transportados en avión hasta el puerto donde empieza el crucero y regresan de nuevo en avión a su país de origen, después del mismo. El tipo de cliente que utiliza esta nueva formula de vacaciones es de clase media y es muy interesante por varias razones, aparte de comprar su paquete turístico en el que esta incluida su travesía por el mar suelen luego quedarse una semana mas en el destino de origen de crucero. Además los precios de estos programas turísticos son francamente competitivos.
La industria de los cruceros ha continuado creciendo muy rápidamente, no solo puede uno visitar a bordo de estos magníficos barcos el Caribe sino que además puede hacerlo visitando por ejemplo el mediterráneo partiendo de Palma de Mallorca en verano, así como, durante el invierno existen magníficos cruceros por le Archipiélago Canario y África.
Es una lastima que solo un pequeño porcentaje de turistas hayan descubierto la maravillosa e incomparable experiencia de efectuar una travesía por el mar, porque es una de las mas bonitas experiencias para alguien que desea pasar unas vacaciones distintas.
No cabe la menor duda de que cada día este tipo de viajes se ira poniendo mas de moda y tendrá mas adeptos.
Pueden estar seguros de que hacer un crucero es una de las mas excitantes vacaciones, en las disfrutara de algo totalmente incomparable.
RECUERDOS
RECUERDOS
Estas letras están dedicadas a todos aquellos que trabajan en el aeropuerto, ya sea Jefes de Escala, o simplemente están en primera linea de un aeropuerto, es la primera imagen que tiene un cliente de la compañía aérea, también a los que despachan los aviones.
Con mi mayor cariño para la familia de Diego Cubes Segura, Jefe de Escala de Air Europa en Valencia, que ha despachado su último vuelo recientemente al fallecer en un trágico accidente. No nos ha abandonado mientras permanezca en nuestros corazones, Hasta siempre Diego.
Estoy camino de mi trabajo, hoy he madrugado mucho, como todos los lunes. Mientras conduzco recuerdo con ternura la fugaz visita que hice a mis hijas mientras ellas dormían, pero sin darme cuenta mi pensamiento se desvanece al recordar que hoy debo atender cuatro aviones, con una diferencia entre unos y otros de diez minutos; me preocupa que alguno pueda salir con retraso. Hay ocasiones en que he llegado a pensar que estoy obsesionado por mi trabajo, pero siempre pesa más en mi la idea de que en el trabajo debe uno poner lo mejor de si mismo. Sin darme cuenta he llegado al aparcamiento del aeropuerto, entre pensamientos y gracias al poco trafico que he encontrado, me ha parecido el trayecto mucho mas corto de lo usual. La distancia que debo recorrer desde mi coche al edificio terminal no es mucha, pero siempre contemplo por unos momentos ese edificio de cemento y hierro que nunca descansa y que parece que tiene vida propia. La entrada al recinto siempre es igual, saludo a los compañeros que llevan toda la noche cumpliendo con su turno y después al llegar a mi oficina me doy cuenta de que alguien se me ha adelantado. Es uno de mis compañeros, que me ha dejado una nota: “Estoy en facturación” solo me queda esperar la llegada de los aviones mientras me dirijo a recoger la información metereologica, me viene a la cabeza la idea de que entre un supervisor de trafico de una línea aérea y una carrera de ciclista a contra reloj existe un gran paralelismo. Cuando un avión llega y debe volver a salir, ya que el tiempo corre siempre resolverlos en un espacio de tiempo muy breve y siempre las consecuencias de esa decisión deben ser las correctas para que no puedan entorpecer la salida del avión que esta atendiendo.
Tal vez por eso haya sentido siempre un gran respeto y admiración hacia todas aquellas personas que pertenecen al Departamento de Trafico de una empresa aérea, ya que la tarea que desarrollan es dura en muchas ocasiones pero también hay que reconocer que es de las más fascinantes.
Por eso tal vez en algunas ocasiones suelo recordar con nostalgia aquellos momentos de tensión y trabajo junto a todos mis compañeros, porque dejaron una profunda huella en mí.