El hombre colgó el telefono decepcionado, su interlocutor al otro lado de la linea era un conocido, hablaban de la vida de las circunstancias de las personas. Solo obtuvo o llego a una conclusión o reflexion sobre sus palabras las de su interlocutor, que claramnente le dijo querido amigo hoy juegas en tercera. Queria esto decir que hay una división de primera, segunda o hasta regional.
Sus esquemas de la vida parecian que iban a romperse, pero su fe en si mismo lo impidieron, porque el entendía que las personas es dificil catalogarlas en que división juegan depende mucho de su calidad humana y entonces penso en la propia liga personal de catalogo de los seres humanos que le había permitido seguir viviendo:
Que pasa con el justo, el necio, el sabio.
Que decir del hombre de ojos altaneros, de lengua mentirosa, del hombre de corazón que trama designios perversos, del falso testigo que profiere calumnias o del que siembra discordias.
Para el es tan importante, luchar contra la calumnia, la falsa acusacion, porque son peor que la muerte, siempre ha creido que muchos caen por la espada, pero muchos más por la lengua. Todo esto si serían divisiones del ser humano pero en ningún caso serían de primera o tercera sino de cloaca. Por muy alta que consideres tu posición en la vida, no eres más que fachada, pavo real, vanidad y anhelo de viento.
Al final se lamentó de no haberle sabido replicar que no hay diviones o ligas, como dijo Oscar Wilde “Todos estamos en la cloaca, pero alguno mirando las estrellas”.
Tomas Cano