No, no estuve, pero tengo las cuentas y la factura falsa del caballo regalado a tu hija pagado con de la hija y de los miles de revistas Preferente compradas con dinero de la empresa para subir la tirada de cara al control de OJD de su amigo Caballero, y facturas falsas de Catering y mucho mas. Puedo seguir hablando. A mi no es al que me condenaron a cárcel e inhabilitación. Puedo seguir contando y de otras empresas.
En el infierno, el poder de las palabras se emplea de un modo totalmente erróneo. Las usamos para maldecir, para culpar, para reprochar, para destruir. También las utilizamos correctamente, por supuesto, pero no lo hacemos a menudo. Por lo general, empleamos las palabras para propagar nuestro veneno personal: para expresar rabia, celos, envidia y odio. Las palabras son pura magia- el don más poderoso que tenemos como seres humanos- y las utilizamos contra nosotros mismos. Planeamos vengarnos y creamos caos con las palabras. Las usamos para fomentar el odio entre las distintas razas, entre diferentes personas, entre las familias, entre las naciones. Hacemos un mal uso de las palabras con gran frecuencia, y así es como creamos y perpetuamos el sueño del infierno. Con el uso erróneo de las palabras, nos perjudicamos los unos a los otros y nos mantenemos mutuamente en un estado de miedo y duda. Dado que las palabras son la magia que poseemos los seres humanos y su uso equivocado es magia negra, utilizamos la magia negra constantemente.
Dedicado a todos los imbeciles que me han criticado toda la vida, con odio, los que escriben con seudonimos incapaces de dar la cara
En una palabra a todos los que prefieren un tonto vivo que a un inteligente vivo.
Estos imbéciles han dado su cerebro a cambio de su vida, antes tontos que vivos. Pero gracias a todos ellos que sería yo sin todos ellos, no habría leyenda, no sería nada. Por favor seguir destilando odio.
La inteligencia intimida y desencadena agresividad de quien no la posee, o está menos dotado. Para todos este cuento anónimo para que duerman o sigan manporreando sus ordenadores destilando odio y rencor. Nadie llega a ser nada sin los enemigos cuanto más enemigos más grande eres. Hablad por favor no dejeis de hacerlo hablad con vuestras palabras vacías.
En una aldea había un anciano muy pobre, pero hasta los reyes lo envidiaban porque poseía un hermoso caballo blanco.
Los reyes le ofrecieron cantidades fabulosas por el caballo, pero el hombre decía: “Para mí, él no es un caballo, es una persona. ¿Y cómo se puede vender a una persona, a un amigo?” Era un hombre pobre pero nunca vendió su caballo.
Una mañana descubrió que el caballo ya no estaba en el establo. Todo el pueblo se reunió diciendo:
-Viejo estúpido. Sabíamos que algún día le robarían su caballo. Hubiera sido mejor que lo vendieras. ¡Qué desgracia!
-No vayan tan lejos -dijo el viejo-. Simplemente digan que el caballo no estaba en el establo. Este es el hecho, todo lo demás es juicio de ustedes. Si es una desgracia o una suerte, yo no lo sé, porque esto apenas es un fragmento.¿Quién sabe lo que va a suceder mañana?
La gente se rió del viejo. Ellos siempre habían sabido que estaba un poco loco. Pero después de 15 días, una noche el caballo regresó. No había sido robado, se había escapado. Y no sólo eso, sino que trajo consigo una docena de caballos salvajes.
De nuevo se reunió la gente diciendo:
-Tenías razón, viejo. No fue una desgracia sino una verdadera suerte.
-De nuevo están yendo demasiado lejos -dijo el viejo-. Digan sólo que el caballo ha vuelto… ¿quién sabe si es una suerte o no? Es sólo un fragmento. Están leyendo apenas una palabra en una oración. ¿Cómo pueden juzgar el libro entero?
Esta vez la gente no pudo decir mucho más, pero por dentro sabían que estaba equivocado. Habían llegado doce caballos hermosos…
El viejo tenía un hijo que comenzó a entrenar a los caballos. Una semana más tarde se cayó de un caballo y se rompió las dos piernas. La gente volvió a reunirse y a juzgar:
-De nuevo tuviste razón -dijeron-. Era una desgracia. Tu único hijo ha perdido el uso de sus piernas y a tu edad él era tu único sostén. Ahora estás más pobre que nunca.
-Están obsesionados con juzgar -dijo el viejo-. No vayan tan lejos, sólo digan que mi hijo se ha roto las dos piernas. Nadie sabe si es una desgracia o una fortuna. La vida viene en fragmentos y nunca se nos da más que esto.
Sucedió que pocas semanas después el país entró en guerra y todos los jóvenes del pueblo eran llevados por la fuerza al ejército. Sólo se salvó el hijo del viejo porque estaba lisiado. El pueblo entero lloraba y se quejaba porque era una guerra perdida de antemano y sabían que la mayoría de los jóvenes no volverían.
-Tenías razón, viejo, era una fortuna. Aunque tullido, tu hijo aún está contigo. Los nuestros se han ido para siempre.
-Siguen juzgando -dijo el viejo-. Nadie sabe. Sólo digan que sus hijos han sido obligados a unirse al ejército y que mi hijo no ha sido obligado. Sólo Dios sabe si es una desgracia o una suerte que así suceda.
No juzgues o jamás serás uno con el todo. Te quedarás obsesionado con fragmentos, sacarás conclusiones de pequeñas cosas. Una vez que juzgas, has dejado de crecer.
No puedes planear el futuro a través del pasado. Estudia el pasado si quieres pronosticar el futuro.
El futuro esta oculto detrás de los hombres que lo hacen. El futuro es algo que cada cual alcanza a un ritmo de sesenta minutos por hora, haga lo que haga, y sea quien sea.
En tres tiempos se divide la vida : en presente, pasado y futuro. El presente en brevisimo, el futuro dudoso y el pasado cierto ( palabras de Séneca)
El encuentro de los enemigos, el insulto inmediato, los golpes y la caida.
El mundo moderno esta lleno de hombres que sostienen dogmas con tanta firmeza, que ni siquiera se dan cuenta que no son más que dogmas.
El odio es la venganza de un cobarde intimidado.
Cuando nuestro odio es demasiado profundo, nos coloca por debajo de aquellos que odiamos.
La esperanza no es ni realidad ni quimera. Es como los caminos de la Tierra, no había caminos; han sido hechos por el gran número de transeuntes (LU XUN)
El reloj cuenta las horas del día y en las noches las horas perdidas.
Tengo tantas cosas que decir, pero no quiero hacerlo con tinta y pluma.
Mucha gente está sobre el mundo, pero no en él.
¿Para que sirve la excelencia? Para la humanidad.
¿Para que sirve la humanidad? Para Dios.
La civilizavión tiene cinco dedos heterogéneos a saber: Moises, Socrates, Jesús, Shakespeare y Freud.
Por último algo que no llegamos a entender o a visualizar, el mayor enemigo de cada uno de nosotros, no es más que el paso del tiempo.
No, no estuve, pero tengo las cuentas y la factura falsa del caballo regalado a tu hija pagado con de la hija y de los miles de revistas Preferente compradas con dinero de la empresa para subir la tirada de cara al control de OJD de su amigo Caballero, y facturas falsas de Catering y mucho mas. Puedo seguir hablando. A mi no es al que me condenaron a cárcel e inhabilitación. Puedo seguir contando y de otras empresas.
En el infierno, el poder de las palabras se emplea de un modo totalmente erróneo. Las usamos para maldecir, para culpar, para reprochar, para destruir. También las utilizamos correctamente, por supuesto, pero no lo hacemos a menudo. Por lo general, empleamos las palabras para propagar nuestro veneno personal: para expresar rabia, celos, envidia y odio. Las palabras son pura magia- el don más poderoso que tenemos como seres humanos- y las utilizamos contra nosotros mismos. Planeamos vengarnos y creamos caos con las palabras. Las usamos para fomentar el odio entre las distintas razas, entre diferentes personas, entre las familias, entre las naciones. Hacemos un mal uso de las palabras con gran frecuencia, y así es como creamos y perpetuamos el sueño del infierno. Con el uso erróneo de las palabras, nos perjudicamos los unos a los otros y nos mantenemos mutuamente en un estado de miedo y duda. Dado que las palabras son la magia que poseemos los seres humanos y su uso equivocado es magia negra, utilizamos la magia negra constantemente.
A propósito, esas tarjetas las imprimió un tal Tomás Cano, no yo. Ni las pagué yo.
Dedicado a todos los imbeciles que me han criticado toda la vida, con odio, los que escriben con seudonimos incapaces de dar la cara
En una palabra a todos los que prefieren un tonto vivo que a un inteligente vivo.
Estos imbéciles han dado su cerebro a cambio de su vida, antes tontos que vivos. Pero gracias a todos ellos que sería yo sin todos ellos, no habría leyenda, no sería nada. Por favor seguir destilando odio.
La inteligencia intimida y desencadena agresividad de quien no la posee, o está menos dotado. Para todos este cuento anónimo para que duerman o sigan manporreando sus ordenadores destilando odio y rencor. Nadie llega a ser nada sin los enemigos cuanto más enemigos más grande eres. Hablad por favor no dejeis de hacerlo hablad con vuestras palabras vacías.
En una aldea había un anciano muy pobre, pero hasta los reyes lo envidiaban porque poseía un hermoso caballo blanco.
Los reyes le ofrecieron cantidades fabulosas por el caballo, pero el hombre decía: “Para mí, él no es un caballo, es una persona. ¿Y cómo se puede vender a una persona, a un amigo?” Era un hombre pobre pero nunca vendió su caballo.
Una mañana descubrió que el caballo ya no estaba en el establo. Todo el pueblo se reunió diciendo:
-Viejo estúpido. Sabíamos que algún día le robarían su caballo. Hubiera sido mejor que lo vendieras. ¡Qué desgracia!
-No vayan tan lejos -dijo el viejo-. Simplemente digan que el caballo no estaba en el establo. Este es el hecho, todo lo demás es juicio de ustedes. Si es una desgracia o una suerte, yo no lo sé, porque esto apenas es un fragmento.¿Quién sabe lo que va a suceder mañana?
La gente se rió del viejo. Ellos siempre habían sabido que estaba un poco loco. Pero después de 15 días, una noche el caballo regresó. No había sido robado, se había escapado. Y no sólo eso, sino que trajo consigo una docena de caballos salvajes.
De nuevo se reunió la gente diciendo:
-Tenías razón, viejo. No fue una desgracia sino una verdadera suerte.
-De nuevo están yendo demasiado lejos -dijo el viejo-. Digan sólo que el caballo ha vuelto… ¿quién sabe si es una suerte o no? Es sólo un fragmento. Están leyendo apenas una palabra en una oración. ¿Cómo pueden juzgar el libro entero?
Esta vez la gente no pudo decir mucho más, pero por dentro sabían que estaba equivocado. Habían llegado doce caballos hermosos…
El viejo tenía un hijo que comenzó a entrenar a los caballos. Una semana más tarde se cayó de un caballo y se rompió las dos piernas. La gente volvió a reunirse y a juzgar:
-De nuevo tuviste razón -dijeron-. Era una desgracia. Tu único hijo ha perdido el uso de sus piernas y a tu edad él era tu único sostén. Ahora estás más pobre que nunca.
-Están obsesionados con juzgar -dijo el viejo-. No vayan tan lejos, sólo digan que mi hijo se ha roto las dos piernas. Nadie sabe si es una desgracia o una fortuna. La vida viene en fragmentos y nunca se nos da más que esto.
Sucedió que pocas semanas después el país entró en guerra y todos los jóvenes del pueblo eran llevados por la fuerza al ejército. Sólo se salvó el hijo del viejo porque estaba lisiado. El pueblo entero lloraba y se quejaba porque era una guerra perdida de antemano y sabían que la mayoría de los jóvenes no volverían.
-Tenías razón, viejo, era una fortuna. Aunque tullido, tu hijo aún está contigo. Los nuestros se han ido para siempre.
-Siguen juzgando -dijo el viejo-. Nadie sabe. Sólo digan que sus hijos han sido obligados a unirse al ejército y que mi hijo no ha sido obligado. Sólo Dios sabe si es una desgracia o una suerte que así suceda.
No juzgues o jamás serás uno con el todo. Te quedarás obsesionado con fragmentos, sacarás conclusiones de pequeñas cosas. Una vez que juzgas, has dejado de crecer.
Jejeje
Ya que me borran, tendré que ponerlo en otro sitio. Qué pena. Hay tanto que decir y reproducir…
No puedes planear el futuro a través del pasado. Estudia el pasado si quieres pronosticar el futuro.
El futuro esta oculto detrás de los hombres que lo hacen. El futuro es algo que cada cual alcanza a un ritmo de sesenta minutos por hora, haga lo que haga, y sea quien sea.
En tres tiempos se divide la vida : en presente, pasado y futuro. El presente en brevisimo, el futuro dudoso y el pasado cierto ( palabras de Séneca)
El encuentro de los enemigos, el insulto inmediato, los golpes y la caida.
El mundo moderno esta lleno de hombres que sostienen dogmas con tanta firmeza, que ni siquiera se dan cuenta que no son más que dogmas.
El odio es la venganza de un cobarde intimidado.
Cuando nuestro odio es demasiado profundo, nos coloca por debajo de aquellos que odiamos.
La esperanza no es ni realidad ni quimera. Es como los caminos de la Tierra, no había caminos; han sido hechos por el gran número de transeuntes (LU XUN)
El reloj cuenta las horas del día y en las noches las horas perdidas.
Tengo tantas cosas que decir, pero no quiero hacerlo con tinta y pluma.
Mucha gente está sobre el mundo, pero no en él.
¿Para que sirve la excelencia? Para la humanidad.
¿Para que sirve la humanidad? Para Dios.
La civilizavión tiene cinco dedos heterogéneos a saber: Moises, Socrates, Jesús, Shakespeare y Freud.
Por último algo que no llegamos a entender o a visualizar, el mayor enemigo de cada uno de nosotros, no es más que el paso del tiempo.