Muchos de las mujeres y hombres que tabajan en el transporte aéreo desconocen a los pioneros que nuestro sector a tenido grandes personas imborrables en mi memoria.
José María Llodra, Patchi Rossich, Alberto Cerezo. Personas que nos han dejado y contribuido grandemente en nuestro sector.
Hoy he tenido la oportunidad de emocionarme con la conversación mantenida con Juan Jose Jerez, hijo de uno de los más importantes personajes de la Aviación Civil española.
Juan Jerez, hizo posible que Air Europa empezara su andadura en la larga distancia trabajando codo con codo para que el Boeing 757, hiciera su primer vuelo ETOPS a New York.
No voy a caer en la tentación de alabar a las personas que ya se han ido, porque cuando uno esta muerto es cuando el ser humano se permite alabar a los que ya no están con nosotros. La obra de todos ellos permanece con nosotros y para muchos mientras los recordemos seguirán estando a nuestro lado hasta el fin de nuestros días, son tantos que me apena no nombrarlos a todos.
Por este motivo les dedico a todos ellos, a todos los que he conocido y han hecho posible que nuestra aviación perdurara a pesar de los momentos puntuales y difíciles que atravesamos hoy en día.
lo voy a hacer con palabras de un poeta.
” Ahora es Otoño y los frutos caen en un largo viaje hacia el olvido.
Las manzanas caen como grandes gotas de rocio magullándose y buscando su propia salida.
Y es tiempo de ir, de despedirse de nuestro propio yo, y de encontrar una salida desde el yo caido.
¿Has construido tu barco de la muerte?
Oh, contrúyelo, pues lo necesitarás.
¡Y la muerte está en el aire como un olor de ceniza¡
¡Ah¡ ¿puedes olerla?
¡Oh, hablemos de la muerte que conocemos, que podemos conocer, la profunda y amorosa muerte de un fuerte corazón en paz¡
Construye entonces el barco de la muerte, porque tienes que hacer el largo viaje hacia el olvido.
Y muere la muerte, larga y penosa muerte que cae entre el viejo yo y el nuevo.
Nuestros cuerpos han caido ya magullados, malamente magullados, y nuestras almas exudan, surgiendo de la cruel herida.
Estamos muriendo, estamos muriendo todos estamos muriendo y nada quedará del flujo de la muerte que surge de nosotros y luego fluirá sobre el mundo, sobre el mundo exterior.”
Espero que me deis cobijo cuando llegue entre vosotros.
TOMAS CANO