Durante nuestra vida, siendo jóvenes, nunca podríamos pensar que llegada cierta edad, nos convertimos en algo parecido a máquinas del tiempo dónde envejecemos más deprisa de lo normal.Todo el mundo tiene un doble fondo en el equipaje que llevamos en nuestra vida. Y los personajes que pueblan las redes sociales, proclamandose como solucionadores o grandes Gurús, nunca nos darán una solución porque no da dinero hablar de los senior.
A pesar de la cantidad de comunity managers, coach, troubleshooter, selección de talento, leadership. gestión empresarial, motivational speaker, que se anuncian en las redes sociales. Ellos son los primeros que ignoran a los mayores de 50 años en adelante. Pero siguen vendiendo billetes a ninguna parte.Yo a estas personas senior los llamaría los amputados por la edad. Ya no les queda ni la indepencia económica, ni la libertad para encontrar un trabajo digno.
Los expertos en recursos humanos han enterrado a este tipo de perfil, porque les dan arcadas de solo ver o pensar en lo putrefactos de sus cerebros,
piensan que clase de hombre ha podido a esta edad ser moldeado a partir de tan pobre arcilla. Los que analizan los perfiles son relativamente jóvenes, pero aceptando este rasgo es inaceptable.
Hoy personas que juraron defender las palabras que habían marcado su vida se encuentran sin trabajo, a pesar de su fidelidad, honradez, convicción en su fé, su voluntad de defender a sus colaboradores y sus ideas, a pesar de todo ello, siguen pensando, por eso existe la esperanza. Ya no encajan en el ascensor de la movilidad social. Los mandamos a la jubilación anticipada osea al hotel de cien estrellas. Ese es su retiro. No más una vida parecida a la estenografía, no importa a la velocidad que vivas o escribas. Estás parado.
Por un lado podemos leer que a este ritmo, nuestra vida laboral esta abocada a retirarnos de trabajar. Tal vez , solo tal vez , a los setenta años, y por otro lado ninguno de estos grandes y elocuentes gurus, puede mantener la mirada de un senior, que se halla sin un trabajo.
Me contaba un amigo recientemente que un compañero de trabajo, le comentaba por que seguía trabajando, porque no se dedica a sus nietos y se fumaba un puro de la vida. Y el le contestó porque la edad está en la cabeza.