RYANAIR
La verdad igual que el arte está en el ojo que la mira. Esta es la reflexión que me hago a mi mismo cuando leo las declaraciones de Air Berlín o del Presidente del Fomento de Turismo de Mallorca.
Hemos puesto de moda por estas fechas pedir a Rajoy, que nuestros deseos los convierta en realidad, que analice a Ryanair una empresa que algo tendrá que incomoda a tantos históricos del turismo, y en especial del transporte aéreo.
Cuando veo que estos ejecutivos juzgan a otro hombre que dirige su empresa a su estilo, siento un gran estremecimiento.
Algunos se atreven a decir que las low cost no transportan clientes de negocios, ni de convenciones, solo pasaje barato, que encima no se aloja en hoteles, me parece una ironía
El problema que tienen estos detractores, es que se han pasado el tiempo estudiando al líder y su liderazgo y han fracasado, la razón es porque han estado muy orientados en analizar a Michael Oleary, responsable de Ryanair, cuando la forma más apropiada es estudiar a los que siguen al líder, que son los únicos que cambiarán el transporte aéreo mundial y barrerán todas aquellas compañías ineficaces, y las que van reduciendo su flota en lugar de crecer.
Los lideres que temen hoy a compañías como Ryanair, es porque el ego de ese líder le ha estado mandando el mensaje de que solo el tiene las respuestas y solo existe una forma de hacer las cosas, que es solo la suya, quien en este caso de sus empleados se verá con coraje para perseguir un cambio o una innovación. Esta es la arterioesclerosis de las compañías que poco a poco irán desapareciendo del sector para dar paso a las low cost. Que tendrán que hasta las compañías tradicionales se apartan para darles paso en su carrera hacia su consolidación total
El futuro esta oculto detrás de los hombres que lo hacen y hoy por lo menos Michael O´leary es uno de ellos mal que les pese a muchos.
Por último les diría a muchos de esos detractores, que la razón es y debe de ser solamente la esclava de las pasiones
TOMAS CANO