EL ODIO SIEMPRE ACTIVO

Me gusta uno de los poetas que más han   sufrido, sobre todo en la pobreza, hombre admirado hasta por Borges. Todos los días me repito a mi mismo este fragmento, de este poeta que escribía con el seudónimo de Almafuerte.
Los que viertan sus lágrimas amantes
sobre las penas que no son sus penas;
los que olvidan el son de sus cadenas
para limar las de los otros antes;
los que van por el mundo delirantes
repartiendo su amor a manos llenas,
caen, bajo el peso de sus obras buenas,
sucios, enfermos, trágicos, sobrantes.
¡Ah! Nunca quieras remediar entuertos;
nunca sigas impulsos compasivos;
ten los garfios del Odio siempre activos
y los ojos del juez siempre despiertos…
¡y al hecharte en la caja de los muertos,
menosprecia los llantos de los vivos!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

quince − ocho =